La Hispania Visigoda
En el año 406 los vándalos, suevos, y alanos invadieron el imperio romano. En el 409 cruzaron los pirineos para invadir la Península Ibérica.
Mientras tanto, los visigodos, que habían tomado Roma hacía dos años, llegaron a la región en el 412, fundando el reino de Toulouse, en el sur de Francia, y extendieron su influencia gradualmente hacia la Península, desplazando a los vándalos y alanos al norte de África.
Luego, tras la conquista de Toulouse por los francos y la pérdida de gran parte de sus territorios en Francia, trasladaron la capital del reino visigodo a Toledo.
Mientras tanto, los visigodos, que habían tomado Roma hacía dos años, llegaron a la región en el 412, fundando el reino de Toulouse, en el sur de Francia, y extendieron su influencia gradualmente hacia la Península, desplazando a los vándalos y alanos al norte de África.
Luego, tras la conquista de Toulouse por los francos y la pérdida de gran parte de sus territorios en Francia, trasladaron la capital del reino visigodo a Toledo.
Se asentaron mayoritariamente por la zona de la Meseta Norte de Castilla, en el centro de la cuenca del río Duero, empezando a crear pequeños núcleos rurales fuera de las grandes urbes romanas. En estos núcleos agrarios se tiende al autoconsumo y se empieza a crear una sociedad pre-feudal. Estas comunidades godas convivían con las comunidades hispano-romanas, pero eran independientes y cada cual tenía sus propias leyes. Con el paso del tiempo tenderían a mezclarse mediante matrimonios mixtos y la unificación de sus leyes.
En cuanto a la religión, los visigodos seguían el arrianismo, y la mayoría de la población de hispano-romanos, era católica. La conversión al catolicismo del rey godo Recaredo en el año 587 favorecería a la plena integración entre las comunidades godas y las hispano-romanas.
La España Musulmana y la Reconquista
El dominio de los visigodos duró hasta el año 711, cuando un ejército musulmán, con unos 50.000 soldados, cruzó el estrecho de Gibraltar y venció al ejército visigodo en la batalla de Guadalete, cerca de Cádiz.
Rodrigo, el último rey godo, fue derrotado y en unos cuatro años terminarían los musulmanes por dominar casi toda la península, convirtiéndose ésta en un emirato, o provincia del imperio musulmán, llamada Al-Andalus.
Los s. VIII y XI, significarían un creciente poderío musulmán, a pesar de que se forman núcleos de resistencia al Norte de la península. Los territorios conquistados se van arabizando y se independizan políticamente del imperio norte-africano.
En el s. X Abderramán III convierte Al-Andalus en califato independiente, con independencia religiosa, siendo una época de gran prosperidad cultural, gracias a las innovaciones en las ciencias y en las letras y la especial atención que dedicaron al desarrollo de las ciudades.
Las ciudades más importantes fueron Valencia, Zaragoza, Sevilla y Córdoba, la cual llegó a ser en el s. X centro cultural de la época y la mayor ciudad de Europa Occidental, contando con 500.000 habitantes.
Sin embargo la decadencia llegó en el s.XI, cuando comenzaron las pugnas entre las distintas familias reales musulmanas y el califato se desmembró en un mosaico de pequeños reinos taifas. El movimiento de Reconquista se hizo cada vez más fuerte, la primera derrota la tendrían los musulmanes en Covadonga, Asturias, de mano del Rey Pelayo en el año 722. A partir de aquí, sobre todo tras la decadencia de los reinos musulmanes, se sucedieron las victorias de los reinos del Norte que fueron avanzando hacia el sur hasta dominar por completo la península.
En el s. XIV los musulmanes españoles sólo poseían el reino de Granada, que mantuvieron hasta finales del s. XV, cuando los Reyes Católicos lo incorporaron a la corona de Castilla.
Rodrigo, el último rey godo, fue derrotado y en unos cuatro años terminarían los musulmanes por dominar casi toda la península, convirtiéndose ésta en un emirato, o provincia del imperio musulmán, llamada Al-Andalus.
Los s. VIII y XI, significarían un creciente poderío musulmán, a pesar de que se forman núcleos de resistencia al Norte de la península. Los territorios conquistados se van arabizando y se independizan políticamente del imperio norte-africano.
En el s. X Abderramán III convierte Al-Andalus en califato independiente, con independencia religiosa, siendo una época de gran prosperidad cultural, gracias a las innovaciones en las ciencias y en las letras y la especial atención que dedicaron al desarrollo de las ciudades.
Las ciudades más importantes fueron Valencia, Zaragoza, Sevilla y Córdoba, la cual llegó a ser en el s. X centro cultural de la época y la mayor ciudad de Europa Occidental, contando con 500.000 habitantes.
Sin embargo la decadencia llegó en el s.XI, cuando comenzaron las pugnas entre las distintas familias reales musulmanas y el califato se desmembró en un mosaico de pequeños reinos taifas. El movimiento de Reconquista se hizo cada vez más fuerte, la primera derrota la tendrían los musulmanes en Covadonga, Asturias, de mano del Rey Pelayo en el año 722. A partir de aquí, sobre todo tras la decadencia de los reinos musulmanes, se sucedieron las victorias de los reinos del Norte que fueron avanzando hacia el sur hasta dominar por completo la península.
En el s. XIV los musulmanes españoles sólo poseían el reino de Granada, que mantuvieron hasta finales del s. XV, cuando los Reyes Católicos lo incorporaron a la corona de Castilla.
Visigodos y musulmanes
La Reconquista Española
Soy Jesús, como mola tu página es super útil .
ResponderEliminarGracias Jesús. El blog está hecho con la intención de ayudaros y ampliar la información de lo que vemos en clase. Nos vemos el lunes. Un abrazo
EliminarSOY RAKI. COMO MOLA
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